PRESENTACIÓN DE LA CANDIDATURA DE
FERMÍN BERNABÉ VÁZQUEZ SÁNCHEZ
Estimados Hermanos
en Xto.:
Me atrevo a
dirigiros estas breves líneas para presentar la candidatura que, si Dios
quiere, encabezaré como Hermano Mayor en las próximas elecciones de la Real
Hermandad Sacramental del Santo Entierro.
Observaréis por los
nombres que me acompañan en la citada candidatura, que son miembros de la Junta
de Gobierno saliente. Personas que habéis visto con asiduidad por la Hermandad
y con los que habéis tenido trato frecuente en los diversos avatares o temas
que hayáis podido necesitar, como en secretaría, mayordomía, diputación mayor
de gobierno, etc.
Completa este
elenco un número de hermanos, entre ellos el que suscribe, que llevan un buen número
de años en la Hermandad y han pertenecido a anteriores Juntas de Gobierno, y
otros, que la frecuentan a través de los cultos y convivencias manteniendo vivo
el pulso de nuestra Corporación.
En definitiva, se
ha constituido un grupo joven, pero con experiencia sobrada en el mundo de las
Cofradías, que aspira llevar a nuestra Hermandad a mayores cotas de crecimiento
en todos los aspectos.
Nuestro programa es
nuevo, pero viejo como el propio Evangelio. Sin menoscabo alguno de la propia
idiosincrasia que nos caracteriza, y con independencia de las lógicas
aspiraciones de mejora en aspectos materiales, extremo por el que se ha luchado
con denuedo en Juntas de Gobierno anteriores, logrando renovar y enriquecer el
Patrimonio heredado de nuestros mayores, no estaría de más apuntalar otros
aspectos que, quizás con el paso de los años, hemos descuidado o, simplemente,
no atendido suficientemente.
Me refiero, y con
esto no quiero convertir la carta en una homilía, a temas tales como la caridad
para con los semejantes, el ánimo de atraer a nuestra Hermandad a cuantas más
personas mejor, la participación activa de la mujer, mantenimiento y mejora de
la procesión. En definitiva, abrir los brazos como lo hizo Nuestro Señor.
Las palabras del
Papa Francisco y la propia universalidad de la Iglesia, unido todo ello a los
tiempos difíciles que nos ha tocado afrontar, deben servirnos de acicate para
dar un salto de calidad importante. No tengamos miedo de compartir nuestra
dicha. Más bien todo lo contrario, seamos generosos, como nuestros mayores, que
supieron ver la valía, o al menos, la ilusión de muchos de los que forman parte
de esta candidatura, cuando todavía éramos jóvenes imberbes.
Debemos creernos
primero, para acometer cualquier otro reto posterior, que somos hermanos e
hijos de un mismo Padre, desterrando rencillas y animadversiones inútiles. Sin
esta premisa, cualquier cosa que hagamos o emprendamos estará condenada al
fracaso, por muy vistosa o brillante que pueda parecer a ojos de terceros.
Puestos estos sólidos
cimientos, todo lo demás vendrá por añadidura. Por tal motivo, solicito vuestro
voto y os animo a que acudáis el día 22 de Noviembre a la Hermandad para emitir
vuestro voto.
Stmo. Cristo
Yacente y María Stma. de Villaviciosa. Orate pro nobis.